Encantadora casa de campo tradicional, reformada con mucho carácter y encanto, ubicada en un pintoresco camino rural a tan solo unos minutos del centro de Pollensa. Su posición es privilegiada, al pie de una montaña, con impresionantes vistas a la sierra de Tramuntana.
El exterior de la casa está rodeado de amplias y bien cuidadas zonas verdes, y cuenta con un acogedor porche que alberga el tradicional horno de leña, junto a una moderna barbacoa y un comedor de verano, ideal para disfrutar de los días soleados y cenar al aire libre. Además, dispone de una piscina privada de generosas dimensiones, acompañada de una terraza solárium, tumbonas, mesa de ping-pong y varios rincones románticos, perfectos para relajarse.
La casa fue completamente reformada hace pocos años, manteniendo su estilo isleño original, pero incorporando modernas comodidades como suelo radiante y aire acondicionado integrado. Sus interiores son espaciosos, luminosos y decorados de manera artística, con muebles y textiles típicos de la zona que contrastan armoniosamente con coloridos cuadros y detalles artísticos que aportan una atmósfera única.
Una amplia sala de estar alberga una chimenea de piedra, sofás cómodos y una elegante mesa de comedor, junto a una barra americana con taburetes, que da acceso a la moderna cocina, equipada con muebles de madera que siguen el estilo rústico. Otra sala adicional ofrece una zona de estar con cómodos sofás y TV, y también cuenta con una chimenea de hierro forjado.
Los dos dormitorios son amplios y confortables, cada uno con dos camas individuales, armarios, TV y un baño en suite: uno con ducha y otro con bañera. La casa también dispone de un aseo de cortesía.
Esta villa es el lugar perfecto para familias que buscan estar cerca del casco antiguo, pero en un entorno tranquilo y relajado.
